A un día de las elecciones autonómicas de la Comunidad de Madrid, electores y candidatos afrontan el silencio electoral previo a la elección presidencial: la jornada de reflexión.

La jornada de reflexión es el día después del último día de campaña electoral, que abarca desde las 00.00 horas del día anterior hasta las 20:00 horas de la jornada electoral, según explica la Ley Orgánica 5/1985 (LOREG). En este día, los electores deben valorar y reflexionar su voto sin recibir influencia política alguna, como recoge el artículo 53 de la LOREG.

Aquellos que incumplan la jornada de reflexión "serán castigados con prisión de tres meses a un año o con una multa de seis a veinticuatro meses", detalla el artículo 144 de la LOREG.

¿Existe la jornada de reflexión en otros países?

Sí, no es un 'invento' español, la jornada de reflexión también existe en países de todo el mundo. En algunos, esta jornada abarca más de un día y en otros se conoce como "veda electoral".

La mayoría de países europeos siguen esta jornada de reflexión de la misma forma que en España. Es el caso de Italia, Reino Unido, Francia, Portugal o Rusia. Sin embargo, no es una medida uniforme en Europa. Algunos países no aplican ningún tipo de restricción de cara al último día previo a las elecciones, como en Alemania. Además del país germano, en otros países como Suecia no existe ley que regule esta jornada, pese a que la mayoría de candidatos suele cumplir la norma.

Fuera de Europa, en países como México o Paraguay la veda electoral se extiende durante tres días antes de la votación, prohibiendo todo tipo de campaña electoral o propaganda y sondeos.

En Argentina, por ejemplo, esta veda electoral es mucho más estricta que en otros lugares, prohibiendo la venta de bebidas alcohólicas antes de los comicios y conllevando sanciones por ello. "Se impondrá prisión de quince días a seis meses, a las personas que expendan bebidas alcohólicas desde doce horas antes y hasta tres horas después de finalizado el acto eleccionario", recoge la ley electoral argentina.

Pero, sin duda, el caso más llamativo es el de Estados Unidos, donde es lícito que los candidatos hagan campaña hasta el último día o incluso pueden pedir el voto durante la jornada electoral, siempre y cuando se encuentren a 30 metros de distancia del colegio electoral.