"Constatamos que, sobre todo en los países del Sur, hay socialdemócratas con los que tenemos puntos de convergencia. No sé si en el seno del mismo grupo, quizá no, pero tal vez tras las europeas, en función de los resultados, podamos construir una coalición", dijo a medios españoles, entre ellos EFE, el máximo responsable de La República En Marcha (LREM), Stanislas Guerini.
Guerini subrayó que, "en un momento tan histórico para Europa", su partido quiere "ampliar las fronteras de (el grupo liberal europeo) ALDE", por lo que apeló a "un diálogo útil, incluido con los socialistas españoles". Y recordó que ayer viajó a Portugal para reunirse, además de con los liberales, con los socialistas portugueses, "que acogieron con mucho entusiasmo la tribuna de Macron" en la que el presidente francés presentó sus ideas para la reforma de la UE.
"Hoy estamos en un proceso de apertura y buscamos más lo que nos une que lo que nos separa (...) Queremos hablar con otras formaciones políticas para agrupar a los demócratas, a los liberales y a los progresistas", explicó. La República En Marcha "sigue manteniendo un diálogo amistoso y constructivo con Ciudadanos", señaló su líder, quien sin embargo reiteró la "línea roja" que para ellos supondría cualquier pacto de esa formación con la ultraderechista Vox.
"Para nosotros eso sería totalmente una línea roja que haría la cooperación, incluido en Europa, imposible", manifestó Guerini. Tras reconocer que el 28 de abril (día de las elecciones generales en España) "será una fecha importante", recordó que LREM "converge con Ciudadanos en el proyecto europeo", en que ambas "se han creado para superar la división entre izquierda y derecha", y en que son "claramente europeístas".
Guerini participó, junto al Gobierno francés casi al completo, en el primer mitin de su partido para las próximas elecciones europeas de mayo, donde presentaron a su cabeza de lista, Nathalie Loiseau, y al resto de candidatos. En el mitin, unas 1.500 personas se reunieron en el suburbio parisino de Aubervilliers para escuchar especialmente a Loiseau, hasta ahora secretaria de Estado de Asuntos Europeos, que ha sido criticada por su perfil bajo y su ausencia de carisma.
La propia Loiseau fue la primera integrante del Ejecutivo francés en levantar su voz frente a eventuales pactos con Vox tras las elecciones andaluzas.