La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha obligado al juez Manuel García-Castellón a citar a la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal como testigo en la causa en la que investiga el espionaje a Javier Gómez de Liaño, exabogado de Luis Bárcenas para que no se difundieran informaciones sobre la trama Gürtel.

Así ha actuado la Sala después de admitir un recurso presentado por Gómez de Liaño, al que se adhirió la acusación popular de Podemos. Cospedal aparece en las agendas del comisario jubilado José Manuel Villarejo codificadas como indicios en la causa y en un informe de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional en el que se recogen conversaciones de los investigados.

En concreto, se trata de la pieza número 36 del caso Villarejo o caso Tándem, que la Sala de lo Penal ordenó reabrir hace meses para averiguar si Bárcenas o su antiguo abogado sufrieron presiones por parte de "terceras personas vinculadas al Partido Popular" para que "no salieran a la luz informaciones comprometedoras o perjudiciales" para la formación.

Gómez de Liaño solicitó la declaración de Cospedal al ser "aludida" en conversaciones de varios investigados analizadas por la Policía, y la de otras personas como Villarejo, que no está investigado en esta pieza del medio centenar que conforman el extenso caso Tándem. El juez García Castellón lo rechazó y ahora la sección tercera de la Sala de lo Penal revoca su decisión y le insta a citar a los testigos propuestos por Gómez de Liaño, que fue abogado de Bárcenas entre 2013 y 2015, entre ellos Cospedal y Villarejo.

Lo hace porque, a diferencia del magistrado, que consideró que se trataba de meros testigos de referencia, estos "estuvieron en reuniones, situaciones u otras circunstancias que les permitieron conocer directamente los hechos investigados en todo o en parte". Consideran los magistrados que "podrían aportar información relevante acerca de los hechos" y que, por tanto, la declaración como testigo de la exnúmero dos del PP, entre otras, es necesaria y pertinente.

Esta línea de investigación discurre de forma paralela al conocido como caso Kitchen, que también es una pieza del caso Villarejo, la número 7, y cuya instrucción ya ha finalizado y está pendiente de los últimos recursos para, después, señalar fecha de juicio. En el caso Kitchen están acusados el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez y varios miembros de la antigua cúpula policial por la presunta operación parapolicial que habría sido orquestada desde el ministerio en 2013 para espiar a Bárcenas y sustraerle documentos sobre el caso Gürtel comprometedores con el PP.