El encargado de valorar la sentencia del caso Palau ha sido el ya dimitido Artur Mas: "Consideramos muy negativa esta sentencia, no la considerábamos de esta dureza en absoluto".

El PDeCAT se desvincula de Convergència en un comunicado, sus líderes guardan silencio y Mas apunta: "¿Qué responsabilidades puede haber más si el propio partido ha desaparecido?". Además, el expresident recuerda que él no estaba investigado en el caso, un argumento que repite ERC.

A pesar de ello, Llinares, exdirector del Palau, apunta que Artur Mas es el que daba las órdenes: "El tesorero de Convergència no tenía capacidad para decidir. Se decidía más arriba".

Él ocupo el sitio de Millet y explicaba en Malas Compañías qué se encontró a su llegada: "Una trabajadora me dijo que estaba triturando documentación". Para que esto no se vuelva a repetir, Catalunya en Comú-Podem ha presentado un paquete de medidas contra la corrupción y Coscubiela apunta que lo que ha pasado no se puede separar de la actual dirección, algo en lo que coinciden los socialistas.