Una vecina de Bélgorod graba desde su ventana cómo un soldado proucraniano avanza por las calles de su ciudad. El vídeo se ha difundido este domingo y es la última imagen de unos combatientes que han convertido al invasor en invadido.

Más de 4.000 rusos han tenido que abandonar sus hogares. El gobernador de la región, Vyacheslav Gladkov, ha accedido a un intercambio de prisioneros. "Lo más probable es que hayan sido asesinados, por difícil que sea decirlo, pero si están vivos me reuniré con ellos", ha declarado.

Mientras tanto Kyiv no reconoce la autoría de estos ataques y recurre a la guerra psicológica a través de un vídeo que unos hackers han colocado en las televisiones de Crimea para jugar con la tan temida como esperada contraofensiva.

Ucrania ha contabilizado hoy los ataques rusos a sus ciudades: 381 drones kamikazes y 185 misiles. Los más afectados por ellos son los niños. Lorena Cobas, responsable de Emergencias de UNICEF España, cuenta a laSexta que "un tercio del país está plagado de minas antipersona y artefactos sin detonar". Desde el inicio del conflicto hasta hoy han muerto más de 500. Otros 1.500 han resultado heridos.