Taiwán ha dado un salto de gigante en las leyes para la libertad sexual y se ha convertido en el primer país de Asia en aprobar el matrimonio entre parejas homosexuales.

El Parlamento de Taiwán ha llevado a cabo la regularización de esta norma después de que, en 2017, la Corte Constitucional considerase que la prohibición de este tipo de unión era anticonstitucional. Por ello, se han debatido tres propuestas, dos que se referían en general a parejas del mismo sexo, y una tercera que especificaba en el matrimonio gay.

Esta última, respaldada por el Partido Democrático Progresista y por los activistas de numerosos movimientos LGTB, ha sido la aprobada con 66 votos a favor frente a 27 en contra, mientras que más de 35.000 personas marchaban por las calles de la ciudad para pedir la no discriminación al colectivo y les permitieran casarse.

Jennifer Lu, coordinadora jefa de la coalición taiwanesa para la igualdad de matrimonio, dijo en una rueda de prensa frente al parlamento que esperaba "que esta sea la última vez" que tengan "que venir aquí".

También se pronunció la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, que pidió a los legisladores que "muestren al mundo que el amor gana". Por el contrario, el presidente de la 'coalición de la felicidad para nuestra siguiente generación' que aboga por el matrimonio tradicional, considera que se está "pisoteando la voluntad del pueblo".