Es la segunda vez que Mitt Romney tiene que pedir perdón en campaña, aunque en esta ocasión el coste político podría ser mayor. El 11 de mayo tuvo que disculparse por sus bromas homófobas cuando estudiaba en el instituto, "travesuras" (según Romney) que tomaban protagonismo cuando Barack Obama declaraba predisposición a legalizar el matrimonio gay. No pasó de anécdota. Seis días después, el candidato republicano fue grabado el 17 de mayo con cámara oculta cuando expresaba su opinión sobre los votantes de Obama y esta vez, a menos de dos meses de las elecciones , los norteamericanos no están para bromas.

El vídeo, que fue grabado en mayo pero desvelado el pasado lunes, muestra a Romney expresando su opinión sobre los partidarios de Barack Obama, a los que considera parásitos de un sistema cuya función es poco que menos que mantenerles con vida.  "Un 47% de la gente votará por el presidente en cualquier caso, este elevado número de americanos dependen del Gobierno y se creen con derecho a comida, vivienda y atención sanitaria” sentenciaba el exgobernador de Massachusetts.

El vídeo destapado por la revista progresista ‘Mother Jones’ se grabó en un evento con donantes millonarios en una mansión de Boca Rota (Florida). Se puede apreciar a un Romney más relajado de lo habitual, empleando una retorica agresiva y una enorme claridad de ideas en lo referente a la captación de votantes demócratas: "El 5%, 6% o 7% de personas a quienes tenemos que convencer votaron por Obama hace cuatro años. Cuando uno les pregunta si Obama ha sido un fracaso, la inmensa mayoría dice que no. Pero si uno les pregunta si se sienten decepcionados al ver que sus políticas no han funcionado, dicen que sí. Al haber votado por él, no quieren que les digan que se equivocaron, que es un mal tipo, que lo hizo mal o que es un corrupto. Aquellas personas cuyo voto tenemos que lograr quieren creer que entonces hicieron lo correcto y que lo que ha ocurrido es que el presidente no ha estado a la altura. Les encanta la expresión de que a Obama se le ha subido a la cabeza".

"El objetivo de mi campaña es ayudar a la gente a asumir más responsabilidades"

El anfitrión de la velada a la que acudieron 150 personas se llama Mark Leder y es un financiero que ha donado 230.000 euros a varios candidatos del partido conservador. Romney aprovechó el perfil de sus interlocutores, similares a Leder, para disertar sobre su visión del sueño americano y de quien tiene derecho a participar de él: “Existe un 47% de personas que dependen del Gobierno, que creen que se sienten víctimas, que creen que el Gobierno tiene la responsabilidad de cuidar de ellos, que creen que tienen el derecho a una atención sanitaria, a comida, a vivienda, a cualquier cosa. Esos son derechos y el Gobierno debería dárselos. Estas son personas que no pagan IRPF. Mi trabajo no es preocuparme por esas personas. Nunca les convenceré de que deben asumir su responsabilidad y cuidar de sus vidas".

Consciente del posible daño que había causado en su ya maltrecha campaña (fue eclipsado Clint Eastwood en la Convención republicana), el propio Romney improvisó ayer en California una comparecencia ante los periodistas para intentar matizar sus palabras. Subrayó que su objetivo era lograr "un futuro más próspero" para "todos los americanos" y reconoció que podía haberse expresado "de un modo más elegante"."Estoy seguro de que podía haberlo dicho de un modo más claro y más efectivo de lo que lo hice en un entorno como aquél", se excusó el candidato. Pero inmediatamente se reafirmó en el fondo de sus afirmaciones: "El objetivo de mi campaña es ayudar a la gente a asumir más responsabilidades y ésta es una pregunta sobre la dirección del país. ¿Crees en una sociedad donde el Gobierno esté en el centro y provea más y más subsidios o crees en cambio en una sociedad de libre mercado donde la gente pueda perseguir sus sueños?".