Seis semanas
Ratas, basura y mal olor: Birmingham, más de un mes llena de basura por la huelga de los trabajadores
Los detalles Los trabajadores piden una mejora de sus condiciones laborales, ya suman seis semanas de huelga y todavía no hay acuerdo para una mejora de sus contratos.

Resumen IA supervisado
Los vecinos de Birmingham enfrentan una crisis de salud pública debido a la acumulación de basura, ratas y mal olor tras seis semanas de huelga de los servicios de limpieza. El conflicto surgió cuando el Ayuntamiento, en bancarrota desde 2023, recortó gastos, lo que llevó a despidos y recortes salariales. El sindicato Unite, crítico con el gobierno de Keir Starmer, denuncia estas medidas. Aunque el Ayuntamiento afirma haber ofrecido una solución justa, el Gobierno insta a ambas partes a resolver el conflicto, mientras 17.000 toneladas de residuos siguen sin recogerse.
* Resumen supervisado por periodistas.
Ratas, basura y mal olor. Con todo ello llevan viviendo semanas los vecinos de Birmingham, la segunda ciudad más grande de Reino Unido, después de que los servicios de limpieza se declararan en huelga denunciando sus malas condiciones laborales.
Todo comenzó cuando el Ayuntamiento de Birmingham declaró un incidente grave el mes pasado tras un enfrentamiento con el sindicato Unite sobre los empleos, salarios y condiciones laborales de los trabajadores, lo que provocó la huelga de los servicios de limpieza. Unite, un histórico aliado del Partido Laborista del primer ministro Keir Starmer, recientemente se ha vuelto cada vez más crítico con el gobierno y la firme postura del primer ministro sobre la huelga también ha provocado tensiones con el sindicato.
El Ayuntamiento se vio obligado a recortar el gasto local tras declararse en bancarrota en 2023 y Unite denuncia que, en esos recortes, hubo un despido y recortes salariales considerables. Por su parte, desde la ciudad se afirma que se ha presentado una oferta justa en la que ningún trabajador perdería dinero, aunque alertan de que los trabajadores están impidiendo la salida de los camiones de basura que cumplen los servicios mínimos.
Mientras tanto, el Gobierno habla de una crisis de salud pública porque ya son seis semanas de acumulación de basuras, lo que está provocando un fuerte mal olor y la llegada de ratas en prácticamente toda la ciudad. De hecho, el Ayuntamiento de Birmingham ha informado que, a finales de marzo, alrededor de 17.000 toneladas de residuos no se habían recogido.
El Gobierno de Starmer afirma haber instado a ambas partes a encontrar una solución y la vicepresidenta, Angela Rayner, declaró ante el parlamento el lunes que estaba tratando de poner fin a la "miseria".