El presidente afgano ha dicho que el alto el fuego comenzará el 12 de junio, el vigésimo séptimo día del Ramadán, y terminará el 19 de ese mes, el quinto día del Eid-el-Fitr, según informa la cadena de televisión Tolo.
"Con el anuncio de alto el fuego, nosotros personificamos la fuerza del Gobierno afgano y la voluntad del pueblo para una resolución pacífica del conflicto afgano", ha afirmado Ghani, en un mensaje de vídeo publicado en la página de Facebook de la Presidencia afgana.
"Este alto el fuego es una oportunidad para los talibán para que entiendan que sus violenta campaña no se está ganando los corazones y las mentes sino alienando al pueblo afgano de su causa", ha asegurado el mandatario afgano.
"El Gobierno de la República Islámica de Afganistán anuncia un alto el fuego desde el vigésimo séptimo día del Ramadán hasta el quinto día del Eid-al-Fitr tras la histórica fatua del Consejo de los Ulemas", ha afirmado.
Este lunes, más de 2.000 clérigos islámicos reunidos en el Consejo de Ulemas en Kabul aprobaron una fatua, edicto religioso, que declaró ilegítimos los ataques suicidas y consideraba la guerra actual como un conflicto "prohibido bajo la ley islámica".
Al final de la reunión, Estado Islámico perpetró un atentado suicida que acabó con la vida de catorce personas, de las cuales siete eran clérigos. Los talibán negaron cualquier implicación con el ataque.En febrero, Ghani propuso el reconocimiento de los talibán como un grupo político legítimo en el marco de un proceso de paz destinado a poner fin a más de 16 años de guerra, según informa Reuters.
En este contexto, el presidente afgano también ofreció un alto el fuego y la liberación de prisioneros talibán, entre otras opciones para impulsar un proceso de paz, incluida la celebración de unas nuevas elecciones en las que pudieran participar los miembros del movimiento integrista, todo ello con el objetivo de sellar el final de un conflicto que en 2017 se cobró más de 10.000 víctimas civiles, entre muertos y heridos.
En agosto de 2017, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una nueva estrategia militar en Afganistán que incluye un aumento de los ataques aéreos, para obligar a los talibán a sentarse a la mesa de negociaciones.
Las fuerzas de seguridad afganas sostienen que el cambio de estrategia ha tenido un efecto importante, aunque los talibán siguen teniendo bajo su dominio amplias zonas de territorio, en un momento en el que el país cuenta con unos 15.600 militares extranjeros, frente a los 140.000 que había en 2014.