Barak Obama en un mitin en Ohio ha insistido en que estas presidenciales son más una elección entre dos candidatos. En su discurso ha dicho: "Vosotros habéis luchado por el cambio también, después de todo lo que hemos pasado juntos, no podemos renunciar ahora".

Antes de este acto de campaña ha hecho una parada para recibir la última información sobre los destrozos del huracán 'Sandy', que inevitablemente ha centrado gran parte de esta campaña electoral.

El empate técnico que se mantiene entre ambos rivales obliga desde hace una semana a centrar los esfuerzos en los ciudadanos indecisos que se concentran en nueve estados.

La movilización va a ser crucial para romper los empates que dan las encuestas, ya no tanto por convencer a ese nicho de indecisos que está entre un 3% y un 5%, sino porque quien quiera ir a votar lo haga.

Florida es un estado decisivo, 12 millones de latinos van a votar en estas elecciones y Obama y Romney son muy conscientes de que para llegar a la Casa Blanca necesitan convencer a esa gran minoría. Florida aporta 29 votos electorales. Es un estado que ha sido históricamente votante republicano, pero que se ha convertido en un "swing state", un estado indeciso.

El voto latino que otorgó a Obama la victoria hace cuatro años se ha convertido en un grupo de indecisos que podrían hacer decantar la balanza, suponen el 11% del voto total, alcanzando un total de 24 millones de electores.

El voto de la población latina en los estados 'péndulo' de Nevada, Colorado y Florida, determinará el margen por el que ganará uno u otro candidato. Florida tiene un 16% de votantes hispanos. En contra de Obama juega la tasa de paro, casi un 10% más alta que la del resto de estadounidenses.

Será la empresa española, 'Scytl', la que cuente los votos de hasta en 1400 condados. Han creado el sistema y los mecanismos para garantizar la seguridad. Pere Vallés, el director de esta empresa ha declarado: "Hay criptografía que garantizan los registros de seguridad de cualquier elección como sería el secreto de voto, la integridad del voto o dotar al votante con mecanismos para verificar que su voto ha sido contado".

Con esta modalidad han votado miles de estadounidenses desde nuestro país. Además han facilitado los impresos y las pautas para realizar el proceso desde aquí, es más cómodo y rápido, dicen, aunque también plantea problemas de seguridad.

Por eso desde esta empresa insisten en dar al votante un recibo que le permita acreditar su elección en el caso de que hubiera cualquier anomalía en el recuento. A parte de los estados indecisos, la otra clave de estas presidenciales es la economía.

Los estadounidenses eligen entre la idea de Obama de que el país ya sale de la crisis y la de Romney de que todavía queda lo peor con Obama de presidente. El dato de paro es del 7,9%, una décima superior al dato del mes de octubre, pero se explica porque hay más personas apuntadas buscando empleo.

Se han creado más empleos que en el mes de octubre, sin duda, ese dato se va a leer de diferente forma en los mítines que tienen convocados ambos candidatos para este sábado. Romney ha acudido a su primer mitin electoral en New Hampshire, en un día agotador para ambos.