El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció hoy la formación de un gobierno de emergencia junto a Beny Gantz, miembro de la oposición, exministro de Defensa y exjefe del Estado Mayor del Ejército, para hacer frente a la guerra con las milicias palestinas de Gaza.

"Ambos acordaron el establecimiento de un gobierno de emergencia y un gabinete de gestión de la guerra", informó un comunicado conjunto firmado por ambos líderes.

Además de Gantz y Netanyahu, el gabinete incluye al actual ministro de Defensa, Yoav Gallant, con un reducido grupo de personas al cargo de decisiones vinculadas a las actuales operaciones militares, iniciadas tras el asalto por tierra, mar y aire de milicianos de Hamás el pasado sábado, informa el diario 'Haaretz'.

El acuerdo llega tras días de conversaciones entre el primer ministro y el líder de la oposición. Netanyahu invitó por primera vez a los líderes de la oposición a formar este Gobierno de emergencia después del ataque sorpresa de Hamás.

La declaración de Netanyahu y Gantz dice: "Los dos acordaron el establecimiento de un Gobierno de emergencia y un gabinete de gestión de la guerra. Se creará un 'gabinete de gestión de guerra' compuesto por tres miembros: el primer ministro, el ministro de Defensa y el presidente de la Unidad Nacional".

También habrá dos funcionarios adicionales que actuarán como observadores en el gabinete de gestión de guerra. "En nombre del partido Unidad Nacional, se añadirán al gabinete político y de seguridad un total de cinco ministros sin cartera (uno de ellos en calidad de observador): Beny Gantz, Gideon Sa'ar, Gadi Eisenkot y otros dos ministros".

Eisenkot y el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, actuarán como observadores de este gabinete, agregó el comunicado. Además, se reservará un sitio en el gabinete de gestión de la guerra para Yair Lapid, quien junto a Gantz son los dos miembros más fuertes de la oposición a la coalición de Netanyahu en el Parlamento. Las negociaciones para la inclusión de Lapid aún no han concluido y medios locales explican que se debe a desacuerdos con los socios ultraderechistas de coalición de Netanyahu.

Por último, el acuerdo establece que, mientras dure la guerra, no se podrán impulsar proyectos de ley ni tomar decisiones gubernamentales que no se vinculen al conflicto con las milicias.