Una extensión de 130 kilómetros a coste cero, eso es lo que ofrece un hombre de 70 años residente en Australia. La única condición que pone para que este trato se lleve a cabo es que el nuevo propietario se encargue de los cerca de 1.200 animales huérfanos o heridos que pasan por allí.

En el hospital de animales Eagles Nest Wildlife de Quennsland tratan cada año a unos 1.200 ejemplares. "En mi experiencia, no hay nada mejor en la vida que salvar a un animal indefenso y sin voz que necesita ayuda", explica el propietario actual.