Varios miles de manifestantes se han concentrado este sábado en el centro de Londres para protestar contra el movimiento Black Lives Matter y en varios momentos se han enfrentado con las fuerzas de seguridad, a las que han lanzado botellas y otros objetos contundentes. Por su parte, la Policía ha respondido con gas lacrimógeno y cargas con porras y a caballo.

La contramanifestación se ha llevado a cabo, tal y como han declarado sus participantes, de "proteger" las estatuas levantadas en torno al Parlamento británico, como la del exprimer ministro Winston Churchill, protegida con unos paneles para evitar ataques como los sufridos por otros monumentos durante las protestas antirracistas.

Tras los incidentes, la ministra del Interior británica, Priti Patel, ha condenado la violencia "meridianamente inaceptable". "Cualquiera que haya perpetrado actos de violencia o vandalismo debe afrontar toda la fuerza de la ley. La violencia contra nuestros policías no será tolerada", ha apuntado.

Las autoridades habían pedido a la población que no participe en las manifestaciones convocadas para este sábado debido al riesgo de violencia. "No salgáis a la calle para protestar en los próximos días", ha publicado el alcalde londinense, Sadiq Khan, que ha reiterado su apoyo al movimiento 'Black Lives Matter'.

Los vídeos difundidos en redes sociales muestran a aficionados al fútbol bebiendo, coreando el nombre de Inglaterra y el himno británico y haciendo el saludo nazi.