España ha caído diez puestos en el ránking facilitado por la organización no gubernamental Transparencia Internacional sobre percepción de la corrupción oficial, hasta ocupar la posición número 40, en el marco de los escándalos que han afectado en los últimos meses a partidos políticos, sindicatos y algunos miembros de la Familia Real.
En su Índice sobre Percepciones de la Corrupción para 2013, la organización ha destacado que España es el segundo gran perdedor de puntos junto a Gambia, Mali, Guinea y Libia. El único país que ha perdido más puntos que los citados países es Siria, sacudido desde hace más de dos años por una cruenta guerra civil.
En base al índice facilitado por la organización, Dinamarca y Nueva Zelanda comparten el primer puesto, seguidos de cerca por Finlandia. Por contra, Somalia, Corea del Norte y Afganistán cierran la tabla, al igual que en 2012.
En la UE, Grecia continúa siendo el país con un mayor nivel de percepción sobre la corrupción oficial, si bien ha ganado cuatro puntos respecto al año anterior y ha subido al puesto 80 respecto al 94 que ocupó en 2012.
Entre las principales economías mundiales, Estados Unidos ha quedado colocado en decimonovena posición y China en la 80, sin cambios respecto al año anterior, mientras que Rusia ha mejorado ligeramente para escalar seis puestos hasta el 127.