Babak Barin, un juez canadiense, ha suspendido parte de una ley de Quebec que prohíbe a las personas usar velos integrales al dar o recibir servicios públicos, una victoria provisional para los grupos de libertades civiles que argumentaron que la ley es inconstitucional y que discrimina a las mujeres musulmanas.
El juez Barin ha suspendido la parte de la ley que prohíbe el uso del niqab hasta que el Gobierno promulgue directrices sobre cómo se aplicará la ley y cómo se otorgarán las exenciones.
El Gobierno de la provincia de Quebec, principalmente francófona, ahora tiene la oportunidad de aclarar en detalle cómo se pondría en práctica la ley.
La ley, aprobada en octubre, afecta a todos, desde maestros y estudiantes hasta empleados del hospital, agentes de Policía, conductores de autobuses y usuarios de tránsito.
Si bien la ley no distingue a ninguna religión por su nombre, el debate se ha centrado en el niqab, una prenda similar al velo islámico que, además de cubrir el pelo, oculta el rostro dejando solo los ojos al descubierto.
El Gobierno liberal de Quebec defiende la ley ante los tribunales, alegando que no discrimina a las mujeres musulmanas y que es necesaria por razones de seguridad, identificación y comunicación.
Los opositores a la ley aseguran que se dirige a una minoría visible que ha sido objeto de amenazas y violencia. En 2011, Quebec tenía alrededor de 243.000 musulmanes de una población de ocho millones, según Statistics Canada.