Después de un duro viaje con su hijo y su nieto para huir de Afganistán, llegaron a Suecia para que Uzbeki pudiese vivir en paz sus últimos días. Sin embargo, Suecia ha rechazado su solicitud de asilo y será deportada de nuevo a su país en los próximos meses.
La carta de denegación le llegó a la familia de la anciana, cuya salud ha empeorado llegando a sufrir un accidente cerebrovascular.
Su familia quiere apelar a la denegación. Sin embargo, desde la Agencia Sueca de Migración han señalado que la edad no es un motivo para justificar el asilo y que Afganistán no es suficientemente inseguro.