Las comunidades autónomas se han mostrado reticentes y recelosas ante la posibilidad de que se les transfiera la competencia para conceder licencias de vehículos de alquiler con conductor (VTC) a su llegada a la reunión con el ministro de Fomento, José Luis Abalos, que tiene como objetivo contribuir a solventar el conflicto entre este sector y el del taxi. "Si lo que se nos transfiere es para solucionar el problema, estamos en ello, si lo que se transfiere es el problema, no", indicó el director general de Transportes de la Junta de Castilla y León, Ignacio Sánchez Pérez, a su llegada a Fomento.

"Desconocemos cómo la transferencia de estas competencias puede aportar algo para atajar el conflicto, pero veremos lo que Fomento propone", añadió el responsable del ramo castellanoleonés, quien destacó el equilibrio que se ha logrado en esta región entre los dos modos de transporte urbano. De igual forma, el secretario de Infraestructuras y Movilidad de la Generalitat de Cataluña, Isidre Gavín, indicó que no estará de acuerdo con el traspaso si es "una transferencia de competencias fallida y vacía de recursos, o el traspaso un problema".

"Tenemos muchos ejemplos de transferencias fallidas", advirtió, para señalar el de las Cercanías ferroviarias. "El traspaso debe ser con recursos y con herramientas suficientes para solucionar el problema", reclamó el representante catalán que, no obstante, aseguró acudir a la reunión "pensando que el Gobierno central actúa con lealtad" y con una "actitud positiva y abierta a formar parte de la solución". Por su parte, el director de Movilidad y Transporte de la Generalitat de Valencia, Carlos Domingo, condicionó la aceptación de las competencias en VTC "a que se den garantías de que será una medida que contribuirá a solucionar el problema", y a que vaya "acompañada de un conjunto de modificaciones legislativas que contribuyan a solventarlo".

Sobre las 18.40 horas arrancó la reunión de la Conferencia Nacional del Transporte, el encuentro entre Abalos y las comunidades autónomas para tratar el conflicto abierto entre el sector del taxi y los VTC. Desde el salón de actos del Ministerio de Fomento donde tiene lugar el encuentro podían oírse los cláxones de los taxis acampados desde el lunes en el Paseo de la Castellana de la capital, a las puertas de la sede de este Departamento, que tocaron todos al unísono coincidiendo con el comienzo del encuentro.

Se trata de una reunión que se perfila como clave para resolver el problema y, por lo tanto, atajar la huelga indefinida que los taxistas de Madrid, Barcelona y otras principales ciudades secundan desde el pasado fin de semana. De hecho, los taxistas de la capital y la Ciudad Condal, acampados desde hace días en el Paseo de la Castellana y la Gran Vía barcelonesa ,respectivamente, ya han anunciado que celebrarán asambleas al término de la reunión para, en función de su resultado, decidir si continúan con las negociaciones.

El punto fundamental del encuentro lo constituye la referida propuesta de Fomento de transferir a los gobiernos regionales la competencia efectiva para conceder licencias de VTC, la que constituye una de las principales reivindicaciones de los taxistas. No obstante, Abalos tendrá durante el encuentro que solventar las reticencias a este traspaso con que las regiones han llegado a la reunión. Asimismo, los taxistas, al igual que algunos ayuntamientos, como los de Madrid y Barcelona, reclaman que en una segunda fase se permita a los Consistorios exigir a las VTC una segunda licencia para circular por sus ciudades, un instrumento con el que podrían así frenar su expansión.

De hecho, la aprobación por parte de Barcelona de un reglamento para articular esta licencia municipal, y la decisión el pasado jueves del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de dejarlo en suspenso por las dudas competenciales que presentaba, es el factor que ha desencadenado el repunte del conflicto que desde hace años enfrenta el sector del taxi y las VTC.