Las inmobiliarias británicas reducen honorarios de intermediación en plena subida del mercado, y los promotores inmobiliarios alicantinos están de enhorabuena.

El ladrillo puede ser uno de los sectores más beneficiados por la nueva política monetaria del Banco Central Europeo. La bajada del euro, y la consiguiente revalorización de la libra esterlina registrada con el inicio del programa de compra de deuda de la institución que preside Mario Draghi, van a permitir una caída de los precios de los miles de casas que cada año compran los británicos en la provincia, lo que deja un panorama óptimo para invertir en vivienda.

Las agencias británicas han pasado de percibir un 5% de media por la comisión del precio de compraventa, a un 3%. Los intermediarios han reducido sus pretensiones para agitar las operaciones, un incentivo para los compradores interesados en comprarse una segunda residencia en la costa o una casa para venirse a vivir.

Estos tres elementos -depreciación del euro, reforma de los planes de pensiones y reducción de las comisiones de los agentes inmobiliarios- llevan al sector a pensar que el 2015 puede ser un gran año para la actividad. "Con un euro barato, va a haber muchas más ventas. Ya notamos bastantes movimiento en este sentido", según explica Jesualdo Ros, secretario general de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de la Provincia de Alicante (Provia).