Desde la entrada en vigor de la reforma de las pensiones en 2013, su crecimiento dejó de basarse en el IPC. Son, desde entonces, otros factores de los que depende: la sostenibilidad y el índice de revalorización pero, ¿qué es el factor de sostenibilidad?

"Calcula un ajuste que hay que hacer en la pensión al nacimiento de la pensión para incorporar el avance de la esperanza de vida" explica José Antonio Arce, profesor de Afi Escuela de Finanzas.

Teniendo en cuenta que la esperanza de vida es cada vez mayor, el tiempo de la prestación es, por tanto, también, más largo y para ajustar precisamente esa circunstancia entra en acción el índice de revalorización.

"Es el criterio matemático que te dice: cuando tengas ingresos por encima de tus gastos, en los presupuestos, sí puedes revalorizar las pensiones, cuando no tengas esos ingresos por encima de los gastos, no puedes aumentar las pensiones" explica Arce.

Para calcularlo, se tienen en cuenta indicadores como la diferencia entre ingresos y gastos de la Seguridad Social, la inflación, el crecimiento del número de pensiones y la diferencia entre las altas y las bajas.

Para ofrecer unos mínimos, la Seguridad Social establece que las pensiones no pueden revalorizarse por debajo de 0,25% al año. Pero los expertos advierten: si el nivel de vida sube pero no las pensiones, esto repercute directamente en el poder adquisitivo de los pensionistas.

"Supongamos que tienes una pensión en torno a 600 euros y la pensión te sube un 0,25% al año, eso en cinco años sería unos 607 euros. Sin embargo, tu cesta de la compra está creciendo un 2% al año. La cesta de la compra te cuesta 660 euros, pero como solo tienes 606 euros, el pensionista tiene que recortar 60 euros" explica el economista José Carlos Díez.

Solo mediante la creación de un empleo de mejor calidad y con mejores salarios, dicen los expertos, podría mejorarse la situación del mercado laboral y, por tanto, la situación de las pensiones.