Saber ahorrar, no endeudarse o conseguir un trabajo bien remunerado son algunas de las lecciones financieras que cada vez más padres inculcan a sus hijos. En España, el 60% de las familias con niños reconoce dedicar tiempo a la educación financiera: el nuestro es uno de los países de Europa más preocupados por enseñar a los más pequeños a gestionar sus finanzas.

Niños como Héctor que, a sus 12 años, administra su propio dinero. En casa le dan una paga que él divide en dos: "Una parte me la guardo y otra me la gasto en cosas mías", detalla. Cuando le pregunta a su madre por qué es tan importante que aprenda esto, ella le responde así: "El día de mañana será importante que sepas cómo gestionar tu propio dinero, tus propios ahorros...".

El objetivo, en definitiva, es inculcar buenos hábitos financieros desde la infancia y hacer entender que toda acción tiene sus consecuencias. Antonio Castelo, de iBroker Global, resume así las claves: "¿Quieres un juego de consola? Tienes que ahorrar, porque hay que pagarlo. ¿Se han acabado tus ahorros? Vale, yo te puedo prestar dinero, pero tú tienes que comprometerte a ahorrar para devolvérmelo".

Seis de cada 10 españoles con hijos fomenta la educación financiera dentro del hogar, según el Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum. A este respecto, Castelo incide en la importancia de "que los niños entiendan que el dinero no es algo que aparece más o menos de una forma espontánea, que cuesta mucho esfuerzo y mucho sacrificio ganarlo". Por su parte, el profesor de Economía Jorge Fonseca advierte de que los grupos financieros nos transmiten la idea de que es muy fácil enriquecerse, sin advertirnos de que también es muy fácil arruinarse".

No obstante, los expertos creen que también es esencial la educación financiera en Secundaria, porque los padres pueden no alcanzar todos los conocimientos necesarios. En este sentido, Gonzalo Bernardos considera "fundamental" que "haya personas que no sean necesariamente los padres que les puedan explicar donde ellos no llegan".

Lo cierto es que España supera la media europea y a otros grandes mercados como Francia, Alemania o Reino Unido en preocupación por la educación financiera de los niños, según el citado estudio. "España es el tercero de Europa en el que los padres y madres más se preocupan por enseñar a sus hijos a no contraer deudas", precisa Víctor González, director de comunicación de Intrum.

Y es que una buena parte de los adultos reconoce que hubieran necesitado más apoyo de niños: "Uno de cada cuatro españoles reconoce que no ha recibido suficiente educación financiera", apunta González.