Rafa Nadal está de vuelta. El balear ha pasado por encima de Dominic Thiem en su primer partido individual tras 349 días sin competir. Después del dobles con Marc López, el campeón de 22 Grand Slam se estrenó en Brisbane con victoria en dos sets en su camino de preparación para el Open de Australia.

En un camino que ha comenzado de forma brillante. Con un 7-5 y un 6-1 ante el que fuese ganador del US Open 2020. Ante él, ante un rival al que ya ha ganado en un total de siete ocasiones tras 16 encuentros disputados, Nadal ha dejado claro que está en forma.

"Poder volver ante un gran público..."

Que su recuperación, complicada recuperación, ha sido perfecta. Porque no solo ha ganado. Porque no solo ha logrado el triunfo. Porque Nadal, porque Rafa, ha dominado. Ha sonreído. Ha disfrutado. Porque el balear no ha podido tener mejor vuelta.

Así de alegre estaba tras conseguir el triunfo: "Es uno de los días más importantes de mi carrera".

"He pasado uno de los años más duros que he tenido. Poder volver ante un gran público y jugar a un nivel positivo desde el primer día es para estar orgulloso. Yo, mi familia, y todos lo que han estado a mi lado", cuenta.

Porque Rafa sabe cómo ha sido el partido: "Igualado el primer set. Los dos hemos sacado muy bien. Pude tener un break con 6-5 y eso marca la diferencia".

En ese sentido, Nadal quiso tener unas palabras para Thiem: "Ha tenido un tiempo complicado, con las lesiones... Estoy feliz de verle en pista. Le deseo lo mejor".