"Recuerdo estar en el aire. Todo se convierte en silencio". Es el recuerdo de Kyle Larson sobre su brutal accidente, un golpe que le tuvo "volando" para acabar chocando contra la protección de las tribunas.

"Caigo al suelo. Deslizo por el suelo. Pero no salgo herido. Veía muchas llamas dentro del coche y salgo rápido", explica. El coche destrozado y toda su parte delantera por la grada.

Ruedas que han llegado a los asientos. El motor incendiado en primera fila. 15 personas acabaron heridas, todas de carácter leve.