Sebastian Vettel se ha visto obligado esta temporada a observar de lejos los puestos de cabeza. Puntuar en cada carrera se ha convertido en su único objetivo, meses antes de hacer las maletas para marcharse a Racing Point, el futuro equipo Aston Martin.

Y el cuatro veces campeón del mundo ya no se corta en sus críticas hacia el equipo, insinuando incluso que el monoplaza de su compañero, Charles Leclerc, es mejor que el suyo. "El otro coche va mucho más rápido, y duele", afirmó nada más terminar el GP de Portugal, donde terminó en décima posición.

"El coche fue muy difícil de pilotar durante toda la carrera. Perdía agarre muy de repente. Fue muy difícil ganar confianza. Tuve vueltas buenas y menos buenas, nada constantes. Falta consistencia. No sé si debería decir algo más, pero mejor no. Lo he probado todo", señaló el piloto alemán.

Y minutos después de estas declaraciones, Mattia Binotto, jefe del equipo, reaccionó de manera contundente. No solo desmintió la teoría de Vettel de que los coches son distintos, sino que le mandó un mensaje con 'dardo' incluido.

"Los coches de Seb y Charles son idénticos, no hay duda. Espero sinceramente que Sebastian pueda llegar a la siguiente ronda en la clasificación de Imola y demostrar más de lo que es capaz de hacer durante la carrera. Charles lo está haciendo realmente bien, pero espero aún más de un segundo piloto", afirmó.

Y es que mientras Vettel no entiendo el bajo ritmo de su monoplaza, Leclerc se mostró encantado con las mejores en el suyo. El monegasco terminó cuarto y continúa ascendiendo en la tabla en busca del primer puesto de los 'mortales', detrás de los dos Mercedes y del Red Bull de MaxVerstappen.