Carlos Sainz ha vuelto a firmar un Gran Premio impecable después de subirse al podio en Japón tras optar por una estrategia a dos paradas. El madrileño consiguió su tercer podio de la temporada en sus tres carreras disputadas después de no competir en Arabia a causa de un apendicitis.

Sin embargo, la sensación en Ferrari no era la de mayor júbilo durante la celebración del podio. Tan solo unos pocos mecánicos se acercaron a felicitar al madrileño después de realizar una carrera en la que 'El Matador' apenas tuvo rival.

Esta imagen recuerda a lo ocurrido durante el GP de Bahrein, cuando Sainz también consiguió la tercera posición y donde tampoco hubo mucha alegría por parte de los de rojo. En esta ocasión, la escena se repite con un Carlos Sainz que apenas pudo estrechar la mano con su mánager, Carlos Oñoro.

El piloto español vuelve a quedar por delante de su compañero de equipo Charles Leclerc por tercera vez consecutiva, algo que, teniendo en cuenta que Sainz no continuará en Ferrari en 2025, no es el escenario favorito para los de Maranello.

Carlos Sainz sigue demostrando estar en perfecta armonía con el SF24 mientras que trata de demostrar, con bastante éxito, todo el talento que posee con el objetivo de llamar la atención de alguna de las escuderías punteras de la parrilla.

'Caso Brody'

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