Fue lo más sonado del Gran Premio de Arabia Saudí y eso que ocurrió una vez finalizada la carrera en Jeddah: la FIA penalizó a Fernando Alonso por segunda vez en el día por no cumplir correctamente la primera sanción.

Eso sí, la Federación lo hizo fuera de tiempo y Aston Martin sacó el cuchillo y presentó una alegación basada en siete casos en los que no se había tomado la misma decisión.

Finalmente, Alonso recuperó el podio que había tenido en sus manos George Russell durante unas horas y provocó un profundo debate en la FIA que, a día de hoy, puede devenir en un cambio del reglamento.

Analizando su segunda sanción en la presentación del libro 'El Gran Circo de la Fórmula 1', Fernando ha señalado que le enfadó lo sucedido, pero que dada la "chapuza" no le quedó más que reír.

"No me daba igual, me fastidiaba un poco, pero veía que había quedado tan mal la FIA, era una chapuza tan grande que hasta me hacía un poco de gracia que me lo quitasen", ha señalado.

"Me dolía un poco, pero yo decía mira qué bien, qué faena y qué imagen van a dar después de 35 vueltas sin ver el incidente y ahora penalizarme después del podio", ha añadido.

Sobre la actitud de sus rivales, el bicampeón no quiso hacer leña del árbol caído: "Supongo que para Mercedes, para George y para los sponsors era lo normal estar en el podio. Era lo normal si lo merecían y si no lo merecían, pues ya había estado en el podio yo".