La cara de Toto Wolff lo decía todo. Fue una de las imágenes más surrealistas del Gran Premio de Canadá: Mick Schumacher deambulando por el box de Mercedes en plena carrera.
Y no, nada tiene que ver con una posible negociación. No hay nada de eso. Simplemente Mick se había perdido. Tras abandonar su coche entró en un box que no era el suyo. Y claro, no encontraba la salida.
Él mismo ha explicado lo que ocurrió: "Normalmente nosotros estamos al final del pitlane, pero cambiaron el orden este fin de semana. Y eso hizo las cosas terriblemente confusas".
En lo deportivo, Mick estaba firmando un gran fin de semana en Canadá cuando un fallo en su Haas le obligó a abandonar: "a hemos demostrado que tenemos un coche con el que puntuar. Podríamos haberlo hecho en Montreal. Sabemos que tenemos la velocidad".
"No hemos traído ninguna actualización y el coche es básicamente el mismo que al principio de la temporada. No obstante, estamos obteniendo buenos resultados. Eso es positivo, por supuesto", explicó el joven alemán.
Al final, nada le salió bien. Tuvo que abandonar la prueba por un problema en su Haas... y acabó en un box que no era de su equipo. Confundido, como Wolff, logró salir y reunirse, esta vez sí, con sus compañeros.