Charles Leclerc se está cansando. El monegasco, que no ha podido pelear por el Mundial hasta el final en ninguna de sus temporadas en Ferrari, no está ni mucho menos en su mejor curso. Ni de lejos en su mejor curso. Superado por Carlos Sainz, sus actuaciones en carrera y en clasificación no están ni mucho menos entre lo más destacado de la F1... y en Canadá además tuvo colaboración de los de Maranello.

Mucha colaboración, porque todo lo que decidieron desde el muro lo decidieron mal en su caso. En la Q2 cayó, y fue justo cuando las cosas se 'complicaron' por el agua, o por el no agua y la elección de neumáticos de seco, en la pista.

Para él no había complejidad alguna: "No. No era complicado. Y no. No había riesgo... pero por alguna razón el equipo decidió lo contrario. Pedí poner secos ya en la vuelta de salida, pero..."

"Albon lo hizo, salió antes que el resto. Fue claramente la decisión correcta. Mi opinión estaba clara, pero no es estamos complicado demasiado la vida. Estoy frustrado", insiste.

Porque Leclerc lo tiene claro: "Si la pista está seca, hay que poner neumáticos de seco. Voy a tener que hablar con el equipo de manera interna... porque no había ya forma más clara de expresarme".

"No podemos volver a cometer estos errores. Estamos en el lado equivocado y les he dicho claramente mi opinión. No sé lo que estaba haciendo Albon, pero yo tenía mi opinión. Había que haber pensado esto dos veces antes de decidir", sentencia.

Malas nuevas, otra vez, en Ferrari. Además del desastre de Leclerc, se suma también la sanción a Carlos Sainz por su acción con Pierre Gasly.