El Real Madrid sigue sufriendo de lo lindo para hacer goles. Y Zinedine Zidane ha tomado una decisión: cambiar el sistema para colocar un delantero centro junto a Karim Benzema. Aunque la paradoja del equipo blanco en la noche en la que recibía al Real Valladolid fue que su gol, el único del partido, llegó con el 4-3-3, con dos extremos puros y un solo delantero. Vinicius Jr, al rescate.

De inicio apareció Luka Jovic, en su mejor encuentro con la camiseta blanca, pero con la pólvora mojada. Dos ocasiones muy claras erradas. La segunda, eso sí, por mérito del guardameta Roberto.

Y Zidane, que le había dado la confianza, le sacó del campo en el minuto 57. El serbio volverá a contar con oportunidades. Su papel fue más que digno en su segundo partido seguido como titular.

El técnico, ante el atasco en ataque, revolucionó el equipo. Un triple cambio con Marco Asensio, Vinicius Jr y Dani Carvajal. Regreso al clásico 4-3-3. Y minutos después el Madrid encontró el gol en una jugada embarullada. Un rechace de un defensa habilitó al brasileño, que definió a la perfección frente a Roberto.

Mientras, en el otro área, Thibaut Courtois alargaba su momento más dulce. Dos manos salvadoras. Decisivas para que el cuadro blanco amarrara los tres puntos.

Vinicius rescató al Madrid en el gol; y Courtois en su propia portería. Todo ello en la noche en la que Luka Jovic jugó su mejor partido, pero sin el premio del gol. Y un delantero, más en el Real Madrid, no puede sobrevivir sin gol.