El pasado mes de octubre salió a la luz el pobre estado en el que se encontraba el Camp Nou. Además de existir deficiencias estructurales que pusieron en riesgo la integridad de los aficionados durante 21 partidos, se localizaron nichos y cantidad de excrementos de paloma por todo el feudo blaugrana, incluso junto a los puestos de comida.

La Junta de Joan Laporta se comprometió a acometer las reformas y mejorar la salubridad del estadio, pero una imagen ha hecho que el Camp Nou y su estado vuelvan a estar en el foco.

Durante el FC Barcelona - Rayo Vallecano de este domingo, las cámaras enfocaron a Pedri que, lesionado, se encontraba en el palco exterior habilitado por el club para los jugadores que no están convocados.

Tras él se podía apreciar el lamentable estado de su asiento: desgastado, roto y dejando al descubierto la goma espuma de la butaca.

La imagen no tardó en hacerse viral en redes sociales y, a pesar de la derrota azulgrana que deja LaLiga en bandeja al Real Madrid para llegar como campeón al Wanda Metropolitano, se convirtió en la protagonista de la noche.