Miguel es un aficionado del Sporting de Gijón que fue agredido por el hecho de llevar la camiseta de su equipo durante San Fermín. Fue en un bar por la noche cuando se disponía a ir al baño cuando, de repente, un hombre se abalanzó sobre él y le propinó una paliza.

Los clientes del bar separaron a ambos y sacaron a Miguel del local, siendo atendido en el almacén del mismo por las heridas que le produjo el individuo. Después, presentó una denuncia y explicó lo ocurrido en Facebook.