El fútbol es un deporte pasional. El que es aficionado de un equipo lo vive como si fuera parte de él y está con su club siempre, en las buenas y en las malas. Un aficionado del Kortijk belga lo ha demostrado esta semana siendo el único aficionado del equipo que se desplazó a Charleroi a apoyar a sus jugadores.

Charleroi y Kortijk disputaban un partido intersemanal de la liga belga. Los aficionados visitantes de mostraron muy en desacuerdo con el horario del encuentro, por lo que decidieron no acudir en forma de protesta.

Sin embargo, un aficionado del Kortijk no actuó como el resto y sí fue a Charleroi a animar a su equipo. Y cuando llegó a la grada, se dio cuenta que nadie más había asistido al partido, por lo que vio los noventa minutos en la grada visitante... ¡completamente solo!

El encuentro se puso muy en contra para él cuando los locales llegaron a ponerse 2-0 a favor, y él sufría sin poder desahogarse con nadie más. No obstante, el Kortijk salió mucho mejor en el segundo tiempo y lograron empatar el partido. Para él, eso era una fiesta y animaba al equipo, aunque su voz apenas sonara.

El partido acabó en empate, pero los jugadores del Kortijk se acercaron a aplaudirle e incluso algunos hablaron con él. Un premio al esfuerzo por llevar solo la animación del equipo.