Desde la previa se veía que el ambiente iba a ser histórico. En los aledaños del Camp Nou, dos horas antes del arranque del Barcelona - Real Madrid femenino, miles de aficionados culés se agolpaban para recibir a sus jugadoras, que disputaban la vuelta de los cuartos de final de la Champions.

El autobús azulgrana fue aclamado por miles de fans, con sus camisetas y sus banderas del Barça. No era para menos. El Camp Nou, a los pies de un equipo que domina todas y cada de las competiciones que disputa. Y se batió un récord. El partido de fútbol femenino con más espectadores: 91.553 personas en la grada.

"Empoderamiento": ese es el mensaje que se pudo leer en el mosaico de la grada, con un Camp Nou a rebosar. Una jornada que quedará para siempre en el fútbol femenino, que sigue rompiendo barreras. "No me imaginaba jugando en el Camp Nou. Me siento muy orgullosa de que el Barça lo haga posible, creo que puede marcar un antes y un después en el fútbol femenino", dijo Alexia Putellas en la previa. Y, sí, jugó en el Camp Nou... y marcó.

El Barça, campeón ya de la Liga Iberdrola, ante un Madrid que sigue creciendo poco a poco. Todo son excelentes noticias para un fútbol español que debe aspirar a títulos en Eurocopa y Mundial en el futuro más próximo.

La superioridad del cuadro azulgrana sigue siendo incuestionable. Ya campeón de la Liga Iberdrola con todo victorias en su casillero, en Europa parece que tampoco tiene rival. A pesar de que el Madrid se llegó a poner por delante (1-2 en la segunda parte), la eliminatoria terminó en goleada (8-3).

Cinco tantos anotaron las chicas de Jonatan Giráldez, tras una segunda mitad más que brillante. El Barça jugará las semifinales de la Champions y seguirá en su camino hacia su segundo título europeo de manera consecutiva.