El asturiano Santi Cazorla puso fin en el amistoso del Villarreal ante el Hércules, a casi dos años sin jugar por problemas físicos y mostró después su agradecimiento al club en el que debutó y creció en la elite, con el que ahora hace la pretemporada y en el que podría jugar la próxima campaña.

"Muy feliz y contento por volver hacer lo que más me gusta. Queda mucho trabajo por delante pero es el primer paso. Eternamente agradecido a la gente por el cariño. Sólo por eso ha merecido la pena llegar hasta aquí. Gracias Villarreal", escribió el asturiano en su perfil en una red social.

Cazorla entró en el terreno de juego a falta de poco más de veinte minutos para que acabara el partido y lo hizo ovacionado por los seguidores que poblaban la tribuna del Mini Estadi del Villarreal, en el que jugó muchos partidos con el filial villarrealense.

Tras ser traspasado en 2011 al Málaga, Cazorla fichó por el Arsenal un año después y cuando estaba viviendo uno de sus mejores momentos en el club inglés, se lesionó en un partido amistoso de la selección española contra Chile el 10 de septiembre de 2013. Un golpe en el talón derecho derivó en una fisura que no le impidió volver a jugar al poco tiempo, aunque lo hizo cada vez con más dolor.

En diciembre de 2015 tuvo que ser operado de la rodilla izquierda y cuando regresó a la competición lo hizo con muchísimos dolores en el talón derecho, lo que le obligó a pedir el cambio en un encuentro entre el Arsenal y el Ludogorets en la Liga de Campeones el 19 de octubre de 2016.

A partir de entonces, el asturiano fue operado en ocho ocasiones y tuvo que someterse también a un tratamiento para acabar con una bacteria de la que, al parecer, se contagió en uno de sus pasos por el quirófano y que le recortó varios centímetros el tendón de Aquiles derecho. Lo hizo ya en Vitoria bajo el tratamiento del doctor Mikel Sánchez y para la recuperación final se puso en manos de Juan Carlos Herranz, fisioterapeuta de la selección española.

Finalmente, y aunque el pasado noviembre tuvo que volver a ser intervenido, Cazorla empezó a entrenarse hace unos meses ya con buenas sensaciones. El pasado mayo, el Arsenal anunció su marcha al llegar a su final el contrato que le había ampliado mientras estaba lesionado y unos días después se confirmó que regresaría al Villarreal para hacer la pretemporada y, si todo va bien, firmar un nuevo contrato.