Los Detroit Pistons siguen empeñados en hacer historia. En dejar marca. En poner su huella imborrable en la NBA. Sí, pero desgraciadamente para ellos y para su afición no hay nada positivo en lo anteriormente dicho. La franquicia, campeona de tres anillos que hicieron leyenda a los 'Bad Boys', ha vuelto a perder un partido más y ya son 36 los que han terminado en derrota para ellos.

De un total de 39, y suman tan solo tres triunfos. Igualaron de hecho la peor marca jamás vista en el torneo, esa mítica de los 28 consecutivos de los Sixers, y van rumbo a ser el peor equipo de toda la temporada regular. Porque lo de los Bobcats va camino de ser poca cosa con lo que los de Michigan están logrando.

Si ya protagonizaron una imagen viral en navidades, ahora han vuelto a hacerlo. Porque pierden, y además con algunas acciones absurdas de falta total y absoluta de concentración. De esas que dejan caer que están en muchos sitios... menos en el partido.

Fueron Stewart y Hayes los protagonistas. El francés sacó la bola para su compañero. Él, a saber por cuál motivo, volvió a hacer lo propio. Sí, pérdida de balón. Pérdida absurda de balón.

El banquillo de los Pistons no daba crédito a lo que veían sus ojos, en un error infantil y ridículo que resume claramente la casi 'perfecta' temporada regular que están haciendo. De no ser por ese partido ante unos Raptors en cuadro a saber de cuántas derrotas consecutivas estaríamos hablando.

Ante los Rockets, otra más. Esta vez tan solo fue por dos puntos. El último cuarto fue clave, con un parcial de 19-24 que dio la victoria a los de Houston.

Tras el encuentro ante Toronto, ya son siete las derrotas consecutivas que llevan. La de los Kings, increíble: pasaron de ganar de 18 en el primer cuarto a irse por detrás al descanso... y a perder por 21 al final del partido.

Baño de masas

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