La NASA está preocupada desde hace años por la posibilidad de que un asteroide pueda impactar contra la Tierra y por esto trabaja en la misión DART, que tendrá como objetivo testar si es posible desviar la trayectoria de un objeto espacial.

La misión despegará el próximo 24 de noviembre a las 10:20 dentro de un cohete SpaceX Falcon 9 desde la Base Espacial Vandenberg en California, aunque no concluirá hasta el 2 de octubre de 2022 cuando una nave espacial impactará contra el asteroide Didymos y su luna Dimorphos.

La nave hará su colisión a una velocidad de 24.000 kilómetros por hora y la NASA estima que ese impacto pueda modificar su velocidad en un milímetro por segundo. Todo será grabado por una sonda llamada LICIACube.

Si la misión resulta exitosa, permitirá comprobar y analizar la capacidad del ser humano para desviar asteroides que sean peligrosos para la Tierra. Según la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio existen más de 2.000 objetos potencialmente peligrosos para nuestro planeta en el espacio.

"DART no es la respuesta final, sino más bien el primer paso importante si necesitáramos defender la Tierra del impacto de un asteroide", dice la NASA, que explica que Dimorphos no representa ningún peligro para nuestro planeta.