Los atentados de París han provocado que muchas empresas y plataformas online como la red social Facebook empiecen a rastrear sus usuarios y páginas en busca de cualquier rastro de yihadismo.
Una de las víctimas de este minucioso proceso de saneamiento ha sido una desarrolladora de software de Estados Unidos llamada Isis Anchalee. Cuando la ingeniera intentó acceder a su cuenta de Facebook se encontró un mensaje anunciando el bloqueo del perfil ya que su nombre coicide con las siglas en ingles del autodenominado Estádo Islámico, ISIS (Estado Islámico de Irak y Levante).
Tras enterarse del bloqueo, Isis denunció rápidamente los hechos en Twitter y la noticia corrió como la pólvora por las redes sociales. Tras la polémica un mánager de Facebook se puso en contacto con la afectada para pedirle disculpas y arreglar la situación.
Facebook thinks I'm a terrorist. Apparently sending them a screenshot of my passport is not good enough for them to reopen my account.
— Isis Anchalee (@isisAnchalee) noviembre 17, 2015
No es la primera vez que suceden hechos de este tipo. Y es que muchas compañías y organizaciones han tenido que cambiar su nombre por contener las siglas del grupo yihadista.
Hasta amenazas de muerte
El precio de divulgar ciencia: amenazas, insultos y acoso, un problema que afecta especialmente a las mujeres
Un arma de doble filo Aunque muchos científicos logran acercar el conocimiento al público, cerca del 50% enfrentan insultos, amenazas e intimidaciones. Esta problemática afecta aún más a las mujeres, quienes constituyen el 57% de las principales víctimas de acoso en este ámbito.