Tras negar que fuera su responsabilidad, la empresa metalúrgica Norilsk Nickel ha reconocido en un comunicado que el hecho de que el río Daldykan se tiñera completamente de rojo fue debido al desprendimiento de uno de sus buques de la planta metalúrgica que se encuentra en las proximidades del río.

"El 5 de septiembre, después de lluvias torrenciales se produjo el desbordamiento de uno de los diques y el agua entró al río Daldykan", escribió la empresa rusa en un comunicado emitido y que publica la BBC.

Además, en el documento facilitado a los medios, la empresa metalúrgica ha querido tranquilizar a los vecinos de la zona, asegurando que este hecho "no presenta peligro para las personas ni para la fauna del río". Además, han indicado que trabajarán para evitar más incidentes como este en el futuro.