Un pescador de la cofradía de Blanes (Girona) ha avistado una ballena muerta en avanzado estado de descomposición a unas 15 millas mar adentro frente a la costa de Tossa de Mar (Girona), ha informado la asociación Edmaktub en un comunicado.
El rorcual común se encontraba a la deriva y extremadamente hinchado y coronado por gaviotas, en estado avanzado de putrefacción, lo que hace sospechar que la ballena podría llevar varios días muerta.
Se trata de la segunda muerte de un rorcual común que se registra esta temporada, ya que el pasado 24 de marzo aparecía el cuerpo de otra ballena de la especie Balaenoptera phyusalus, arrastrado por un carguero desde Vigo.
La asociación ha lamentado que "es una triste estadística para la conservación de una especie protegida por encontrarse en peligro de extinción": el rorcual común o ballena de aleta, con sus hasta 24 metros de longitud es la mayor ballena que transita regularmente el Mediterráneo.
Con el objetivo de estudiar estas ballenas y las condiciones oceanográficas que hacen posible su presencia en la costa catalana cada primavera, la asociación desarrolla el Proyecto Rorcual, que en 2017 cumple su cuarta temporada consecutiva, con salidas diarias para la observación y recogida de muestras durante los meses de marzo, abril y mayo.