Los Toyota Yaris y Mazda2 dejan de venderse con motor diésel: Lograron cifras muy bajas
Los Toyota Yaris y Mazda2 dejan de venderse con motor diésel: Lograron cifras muy bajas
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Poco a poco las matriculaciones de vehículos diésel van perdiendo fuerza. La principal razón se debe a la constante mejora en los motores de gasolina que han conseguido reducir notablemente el gasto aumentando el rendimiento, algo que los acerca a los diésel siendo además más baratos de mantener. Toyota sabe que el mercado debe evolucionar y su apuesta por los híbridos ha provocado que el Yaris con motor diésel no tenga relevancia en España. El 1.5 HSD ha conseguido convertirse en la opción preferida -en la foto principal- y el diésel ha sido elegido por muy pocos usuarios, de manera que han optado por cesar su comercialización. El motor empleado en el Yaris se seguirá usando en el Auris. Se trata de un 1,4 litros con 90 CV que gasta poco combustible y mueve bien el ligero conjunto del polivalente pero no es refinado y tiene un precio elevado. En cuanto a Mazda, coincidiendo con este mes de julio termina la comercialización del pequeño "2" con el bloque 1.5 SKYACTIV-D de 105 CV. Sus ventas en el acumulado del año han sido tan bajas que ni se lo han pensado dos veces. La opción de mayor éxito en la gama Mazda2 está asociada al bloque 1.5 SKYACTIV-G con 90 CV, un motor que logra un nivel de prestaciones satisfactorio gastando poco combustible. Hay que reconocer que el 1.5 SKY-D de 105 CV mueve con gran soltura la carrocería del Mazda2 y además gasta muy poco pero el coste adicional no compensa y es preferible incluso elegir el 1.5 SKY-G de 115 CV, algo más rápido y bastante comedido en los consumos. Es de suponer que no serán los únicos diésel del segmento B en desaparecer aunque de momento no parece fácil que modelos como los SEAT Ibiza, Peugeot 208 o Volkswagen Polo dejen de ofertarlos debido a que en este caso sí tienen mucha aceptación.