Dos años y cinco millones de euros después, el Bugatti Divo ya está listo

Hace dos años que Bugatti presentó un aperitivo de lo que sería el Divo, una de esas versiones del Chiron a las que ya nos ha acostumbrado. Esta, en concreto, se caracteriza por un diseño más drástico que su fuente de inspiración. Ahora, 24 meses después, la marca francesa ha desvelado la versión final de producción y ha puesto fecha a las primeras entregas: las hará a finales de 2020.

Esta interpretación del Bugatti Chiron sólo conserva intacta una parte de este superdeportivo, el motor: bajo su capó hay un 8.0 W16 con cuatro turbos de 1.500 caballos y 1.600 Nm de par máximo. Y, como siempre, no estará al alcance de todos los bolsillos. Se trata de una edición que sólo contará con 40 unidades y cada una de ellas costará 5 millones de euros.

5.000 kilómetros de pruebas

Dos años habrán tenido que esperar estas pocas decenas de agraciados conductores para ponerse al volante del Bugatti Divo. Un tiempo excesivo para algunos, pero necesario desde el punto de vista del fabricante galo. Durante el primer año de desarrollo se dieron los pasos necesarios hasta que se logró el objetivo marcado para esos doce meses: el prototipo original dibujó sus primeros kilómetros.

A partir de entonces se centraron en la puesta a punto de este superdeportivo. El chasis, por ejemplo, ha necesitado acumular más de 5.000 kilómetros en diversas condiciones y probar los tres modos de conducción para conseguir una configuración más directa. En consecuencia, ha cambiado la inclinación de las ruedas en los ejes delantero y trasero, los resortes más duros y su equilibrio está más orientado hacia adelante.

35 kilos menos

Con la respuesta correcta de la parte mecánica, era el turno de poner a dieta al Divo. Bugatti ha conseguido restarle 35 kilos usando los materiales más ligeros posibles y para ello ha reducido los aislantes, ha apostado por la fibra de carbono para piezas como el intercooler y ha rediseñado partes como las llantas o el sistema de audio. Este empeño no era en balde: al mismo tiempo que perdía peso, el Divo mejoraba su aerodinámica: ahora tiene 90 kilos más de carga.

Por último, cabe destacar que su diseño exterior será más radical que el del Chiron. Usando el modelo original como lienzo, Bugatti ha dispuesto un alerón más ancho, un nuevo capó trasero, nuevos conductos de aire o unos llamativos faros LED que son extremadamente compactos y livianos con una apertura de luz de 35 milímetros.