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Coches y sostenibilidad: cómo elegir sin contaminar tanto
Si te vas a comprar un coche este 2025, tienes que tener muy en cuenta el consumo y las emisiones para elegir con cabeza y que la compra tenga sentido dentro de unos años.
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El consumo de combustible es una de las cuestiones en las que cualquier conductor se fija a la hora de comprar un coche, ya sea nuevo o de segunda mano. Y para hablar de sostenibilidad, tienes que saber que no todo es CO₂. Sí, los vehículos generan emisiones de gases como el dióxido de carbono —muy relacionado con el calentamiento global—, pero también óxidos de nitrógeno (NOx) y partículas en suspensión, que afectan a la calidad del aire en las ciudades.
Además, hay que saber diferenciar entre emisiones directas —las que se producen al circular— y las emisiones indirectas —las que se generan al fabricar un coche o al producir la electricidad para recargar un vehículo eléctrico—. Ahora bien, ¿qué necesitas tener en cuenta a la hora de comprarte un coche? Si no sabes por dónde empezar ni en qué fijarte, toma nota.
¿Qué coches contaminan menos según cómo lo uses?
Como siempre en casi todos los ámbitos de la vida, depende. Depende de tus necesidades y del uso que le des al coche, porque no es lo mismo el vehículo que utilizas a diario para ir a trabajar y con el que te mueves sobre todo en ciudad que el que utilizas los fines de semana o durante las vacaciones para hacer trayectos largos.
En el primer ejemplo, lo que te conviene es un coche con etiqueta ECO o Cero, porque estos no emiten (tantos) gases contaminantes y puedes acceder con ellos a las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). En el segundo caso, un coche diésel moderno puede ser mucho más eficiente. Aunque la etiqueta sea 'inferior' —va a tener la C, de color verde—, el consumo en autovía te va a compensar bastante. Y también hay híbridos autorrecargables que equilibran muy bien el consumo en ciudad y carretera.
Otro consejo: ojo con el tipo de coche. Lógicamente, un SUV grande va a consumir (y contaminar) mucho más que un utilitario urbano, aunque los dos sean híbridos. Por eso, elige un coche ajustado a tus necesidades reales, sin exceso de peso ni de potencia. Tu bolsillo te lo va a agradecer, pero también estarás siendo sostenible con el medioambiente.
¿Dudas con las etiquetas medioambientales?
Las etiquetas ambientales de la DGT llevan ya varios años con nosotros, y poco a poco las restricciones son más estrictas para los vehículos que carecen de ellas. Lógicamente, son una buena guía a la hora de comprarte un coche nuevo, pero tampoco las tomes al pie de la letra para saber lo que consume un coche.
Por ejemplo, un híbrido ligero con etiqueta ECO puede contaminar más que uno de gasolina moderno con etiqueta C si el primero es muy pesado o si el motor térmico entra todo el tiempo. Por eso, compara siempre los consumos reales (no solo los homologados), consulta pruebas independientes y valora el ciclo de vida del vehículo.
¿Está fabricado con materiales reciclables? ¿Es fácil de mantener? ¿Seguirá siendo eficiente de aquí a 10 años? Son preguntas que te puedes hacer antes de comprar un coche y que responderán a muchas de tus preguntas.
Y, por último, ten en cuenta las ayudas del Plan Moves III, los descuentos fiscales y las normativas de cada ciudad. Hay zonas que ya restringen el acceso a coches sin distintivo ambiental, hasta a los residentes, y los etiqueta B serán los próximos 'vetados'. Por tanto, compra siempre con visión de futuro.
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