LAS VENTAJAS DEL EARLY ADOPTER
Coches con etiqueta ECO de marcas emergentes: más por menos
¿Recuerdas cuando te compraste tu primer móvil Samsung frente a un Nokia? ¿Por qué no repetir la jugada con tu próximo coche? En esta lista te contamos cuáles son los coches de marcas desconocidas o infravaloradas que ofrecen más por menos.

Publicidad
Los precios de los coches nuevos están por las nubes, y las marcas emergentes se han convertido en la vía más lógica para conseguir un coche mejor equipado, con etiqueta ECO y sin hipotecar medio sueldo en cuotas. La clave está en que muchas recurren al GLP o a la microhibridación para sacar la etiqueta sin inflar el coste, lo que te permite estrenar coche con más chucherías que un compacto tradicional.
Aquí van los modelos que realmente merecen la pena si quieres huir de las marcas de siempre.
Dacia Sandero ECO-G

El Sandero ECO-G sigue siendo el acceso inteligente a la etiqueta ECO gracias a su motor 1.0 TCe de 100 CV adaptado a GLP. No tiene artificios: consume poco, el motor va fino y la autonomía combinada es larga, perfecta para quien pisa ciudad a diario pero no quiere pasar por el aro de un híbrido más caro.
La calidad es buena pero básica. Lo importante es que el mantenimiento cuesta menos que en casi cualquier rival de su tamaño, y la red de talleres es inmensa. Eso, en un coche de presupuesto ajustado, vale oro.
Es la compra para quien no quiere sorpresas. Económico, sencillo de mantener y con consumos reales muy contenidos. No deslumbra, pero sí cumple exactamente lo que promete. Y no es el más emergente si tenemos en cuenta que el coche lleva bastante tiempo entre nosotros, pero sigue siendo una apuesta de la que muchos de primeras desconfiarían.
Bestune T77 GLP

El T77 GLP apuesta por el diseño y la presencia. Es el más llamativo del grupo y es también uno de los que más sensación de coche “premium barato” transmite al sentarte. Con su motor 1.5 turbo de 160 CV va sobrado para el día a día y sorprende su aplomo en autovía.
Por dentro ofrece pantallas amplias, buenos ajustes y un equipamiento muy generoso para su precio. Incluso en viajes largos mantiene buen confort, y la conversión a GLP está bien lograda, sin tirones ni pérdidas de potencia evidentes.
Eso sí, requiere una comprobación seria del importador: red disponible, plazos de garantía y tiempos de suministro. Si todo eso te cuadra, te estás comprando un coche muy equipado por el precio por el que otros te ofrecen lo básico.
Omoda 5 Híbrido

El Omoda 5 híbrido combina un motor de gasolina con asistencia eléctrica para lograr etiqueta ECO sin depender de GLP. En ciudad es suave, silencioso y bastante más eficiente que la mayoría de SUV de gasolina tradicionales.
El interior es moderno. Pantallas grandes, ayudas a la conducción bien afinadas y un acabado que, sin ser lujoso, transmite la sensación de coche actual y tecnológico. La postura de conducción es cómoda y el maletero tiene espacio real para uso diario.
Si te mueves mucho en entorno urbano, es de los que más ahorra sin complicarte la vida con enchufes ni baterías grandes. Es la alternativa lógica para quien quiere ECO pero prefiere evitar el GLP.
Jaecoo 5

El Jaecoo 5 recurre a la microhibridación para obtener la etiqueta ECO, y lo hace sin añadir peso ni complejidad. Su motor 1.6 turbo empuja con ganas y el sistema de 48 V ayuda en arrancadas y maniobras urbanas, reduciendo consumos en tráfico denso.
Por dentro es el más serio del grupo, con materiales agradables, buena insonorización y un aire más “europeo” que muchos de sus rivales. El maletero es amplio y la posición de conducción está bien resuelta, algo que se agradece en viajes.
Es la elección para quien busca un SUV más refinado y no quiere GLP ni híbridos completos. Gasta poco, empuja bien y ofrece imagen sin disparar el precio.
Si lo tuyo es exprimir cada céntimo, los GLP (Sandero, Pro y T77) son los que más ahorran por kilómetro. Si prefieres suavidad y conducción urbana, el Omoda 5 híbrido es la compra sensata. Y si buscas un SUV con presencia y consumos moderados sin meterte en GLP, el Jaecoo 5 es el más equilibrado.
Así es como se paga menos por más coche, siempre con etiqueta ECO bajo el brazo y sin entrar en cuotas estratosféricas.
Publicidad





