La pizza es versátil y deliciosa. Sencilla, pero con capacidad de convertirse en una joya culinaria. Un todoterreno al alcance de todos y que a todos gusta. En este artículo vamos a explicarte cómo hacer pizza en casa. No sabemos si te quedará como la mejor pizza de España o no, pero seguro que estará deliciosa.

Hay muchas recetas y diferentes teorías sobre cuál es el truco de la pizza perfecta. Nosotros destacamos dos elementos: la paciencia y los buenos ingredientes.

Ingredientes para hacer masa de pizza casera

Los ingredientes de la masa de la pizza son los siguientes: harina, agua, levadura fresca, sal y aceite. Las cantidades varían en función de cuantas pizzas queramos hacer. También sucede que cada harina necesita mayor o menor hidratación. Conseguir el punto adecuado de la masa hará que la pizza quede (casi) como salida de un horno napolitano.

Cómo hacer masa de pizza casera

Las cantidades siguientes están calculadas para hacer dos pizzas redondas. Necesitas:

  • 500 gr de harina de fuerza
  • 325 gr de agua
  • 5 gr de levadura fresca
  • 10 gr de sal fina
  • Un chorrito de aceite de oliva virgen extra

Elaboración de la masa

1.Vierte en un bol el aceite, el agua y la levadura. Mezcla bien y añade la harina y la pizca de sal. Cuando la harina esté toda hidratada, pásala a la encimera para amasar bien. (Si tienes un robot de cocina que amase… ya sabes que puedes hacer la masa en él en unos tres minutos).

2.Pon un poco de harina sobre la encimera y amasa unos cuatro minutos sin parar hasta que la masa esté lisa.

3.Dejamos que la masa repose durante una hora y después la partimos en dos y hacemos dos bolas. Cada una de ellas habrá que amasarla y estirarla antes de colocarle los ingredientes correspondientes. Recuerda: la pizza italiana siempre lleva tomate y mozzarella. Por cierto, si eres amante de los tomates, te dejamos este artículo sobre cómo y cuándo cultivar tomates en casa.

Cómo preparar la mejor pizza en casa

Si dispones de tiempo te recomendamos que hagas la masa de la pizza de un día para otro. La dejarás reposando en el frigorífico. Dejar fermentar la masa al menos durante 24 horas hace que sea más digerible, ya que la levadura puede hacer mejor todo el proceso transformación. Lo notarás en el sabor y en la textura de la masa, con esas características burbujas.

Si quieres hacer la pizza para comer, prepara la masa el día anterior a la hora de la comida, y lo mismo con la cena.

Al día siguiente, tendrás que sacar la masa del frigorífico para que se atempere unas horas antes de su manipulación (si es para comer, sácala en el desayuno). Después solo habrá que darle el último amasado, aliñarla, estirarla y hornearla.

Recetas de pizzas clásicas

Pon sobre la base salsa de tomate y mozzarella de la mejor calidad que puedas y después elige los ingredientes que prefieras.

Margarita: tomate, mozzarella, albahaca fresca.

Marinera: tomate, ajo picado, orégano seco.

Napolitana: tomate, mozzarella y anchoas.

Pizza de pepperoni: mozzarella, pepperoni en rodajas, pimiento rojo asado sin piel, albahaca fresca.