Sí, el día de Nochebuena es el día del año en que más infartos se producen. Así lo explicaba el Dr. César Carballo en Más Vale Sábado: "Se debe al estrés emocional, que comemos y bebemos más de la cuenta" y debemos tener en cuenta que hay mucha gente con cardiopatía, con enfermedades cardiovasculares o factores de riesgo cardiovasculares. Y es importante, tener esto muy cuenta.
Son muchos los estudios que han demostrado esta asociación. Por ejemplo, en 2018 una investigación sueca publicada en la revista científica 'British Medical Journal' sostenía que en la noche de Nochebuena el riesgo de tener un infarto en personas mayores de 75 años con diabetes y cardiopatías aumenta un 37%.
También, este estudio mostró que tanto las vacaciones de navidad como las de verano eran épocas más propensas a tener un ataque cardiaco o infarto: un 15% más en Navidades y un 12% más en verano, en comparación con las dos semanas anteriores y posteriores a ambas fechas.
Otra investigación 'The Holidays as a Risk Factor for Death' realizada en esta ocasión por la Universidad de Duke EEUU certifica igualmente que el 25 de diciembre es el que registra más fallecimientos por infartos o ataques al corazón en todo el año, seguido del 26 de diciembre y del 1 de enero, tal como informa la Fundación Española del Corazón (FEC) en este artículo.
Y como decía el doctor Carballo, el estrés emocional de estas fechas para personas mayores y con enfermedades supone un "extra" añadido. Además de que comemos y bebemos más, algo que puede pasar factura a personas que tienen ciertas cardiopatías o factores de riesgo cardiovasculares como es por ejemplo, la diabetes.
De hecho, y tal como explican los profesionales de la FEC, las principales causas del aumento de fallecimientos cardiacos durante estas fechas se resumen, fundamentalmente, en dos:
- Menor control de determinados factores de riesgo cardiovascular.
- Factores psicológicos: la emotividad y la nostalgia habituales de las fechas navideñas, junto con el estrés y la típica desconcordia familiar.
Consejos y recomendaciones
Es por ello, fundamental disfrutar de las fiestas pero con moderación: cuidado con las comidas, cuidado con el alcohol y sobre todo, las personas que tienen factores de riesgo. Algunos consejos que ofrecen los profesionales de la FEC son en primer lugar, controlar los excesos ya que no son buenos para nadie y menos aún para personas con problemas del corazón.
"La ingesta desproporcionada de sal, alcohol, azúcares y grasas puede producirles descompensaciones y conllevarles problemas mayores", explica en dicho informe de la FEC el Dr. Juan Manuel Escudier, miembro de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y cardiólogo del Hospital Universitario de Puerta de Hierro de Majadahonda.
El doctor señala la importancia de seguir la rutina a pesar de las fiestas. Es fundamental, seguir tomando a rajatabla la medicación, realizar ejercicio físico, adaptado a las condiciones de cada uno, y no dejar las visitas al médico y así se requiere, esto es, no posponer la visita al médico por el hecho de que sean fiestas.
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Desde la Asociación Americana del Corazón también reiteran estos tres consejos fundamentales: tomar la medicación, movernos y hacer actividad física, y sobre todo celebrar con moderación. Tal como aconsejan los cardiólogos americanos, es importante pese a las fiestas, comer lo más saludable posible (algo que no significa privarse de caprichos, pero con moderación y con control) y tener cuidado con la sal y el sodio y sobre todo, seguir controlando nuestros factores de riesgo.