5 localidades españolas para visitar en Halloween

Por fin ha llegado la fecha, el 31 de octubre es en muchos países una noche muy especial, perfecta para contar historias de miedo, para disfrazarse o para visitar lugares que nos den escalofríos. Aunque es una fiesta que tiene sus orígenes en el extranjero, cada vez son más las ciudades españolas que se apuntan a sus celebraciones y tradiciones. La celebración de Halloween tuvo su origen en el pueblo celta, entre los que vivían sacerdotes paganos y druidas que creían en la inmortalidad del alma. Para ellos, este día 31 de octubre estaba señalado en el calendario como la fecha en la cual los espíritus volvían. El año celta terminaba en esta época y para ellos significaba la iniciación de una nueva vida. Cuando los pueblos celtas se convirtieron al cristianismo, no abandonaron del todo sus costumbres paganas y al coincidir en esta fecha la celebración del día de Todos los Santos con las antiguas costumbres, ambas fiestas se mezclaron un poco en algunos casos. La introducción de Halloween en Estados Unidos llegó de la mano de inmigrantes irlandeses y desde entonces, se ha extendido por todo el mundo. Brujas, duendes, vampiros, fantasmas, calabazas siniestras, truco o trato, caramelos, disfraces y monstruos de todo tipo. Aunque los que más disfrutan de esta fiesta suelen ser los más pequeños de la casa, también los adultos tienen la posibilidad de realizar muchas actividades. Una buena opción para pasar esta noche tan especial y poner a prueba la tolerancia al miedo es viajar a algunas de las ciudades en las que sentir verdaderos escalofríos. Te proponemos localidades repartidas por toda nuestra geografía: Bélmez, Zugarramurdi, Belchite, Ochate o La Mussara. Tú eliges el destino, nosotros te descubrimos qué se esconde detrás de estas localidades aparentemente normales. Historias paranormales, apariciones siniestras o leyendas que han marcado el pasado, presente y futuro de estos lugares.