¿QUÉ SE CONOCE AL RESPECTO?
Un exfuncionario denuncia que el Gobierno de Estados Unidos tiene en su poder naves extraterrestres
David Charles Grusch ha expresado que el Gobierno estadounidense tiene en su poder objetos exóticos que no han sido desarrollados por los humanos.
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Hace unos tres meses, un funcionario del Pentágono, Sean Kirkpatrick, afirmaba que hay una nave nodriza en nuestro sistema solar. Esto no hizo más que acrecentar los rumores de que los extraterrestres existen y han visitado (o están a punto) de visitar la Tierra.
Además, ante el aumento de avistamientos de ovnis o UAP (fenómenos anómalos no identificados), la NASA desarrolló una hoja de ruta para analizarlos. Pero el caso es que ahora, otro exfuncionario de los Estados Unidos ha afirmado que en su país se guardan objetos provenientes de fuera de la Tierra.
Ha sido el exfuncionario de inteligencia David Charles Grusch quien ha denunciado al Gobierno de su país. Este exoficial de combate ha trabajado en un grupo de análisis de UAP del Pentágono, investigando los fenómenos anómalos que se detectan en Estados Unidos.
Grusch ha afirmado que en Estados Unidos se llevan décadas recuperando fragmentos parciales o vehículos intactos de procedencia desconocida. De hecho, asegura que son "de origen exótico (inteligencia no humana, ya sea extraterrestre o de origen desconocido) según las morfologías del vehículo y las pruebas de ciencia de materiales y la posesión de arreglos atómicos únicos y firmas radiológicas", según recoge 'The Debrief'.
"No estamos hablando de orígenes o identidades prosaicas", continúa el exfuncionario. "El material incluye vehículos intactos y parcialmente intactos" de origen dudoso, por lo que puede apuntar a que hayan llegado a la Tierra provenientes de otros planetas.
En relación a su denuncia, Grusch ha proporcionado al Congreso y al Inspector General de la Comunidad de Inteligencia amplia información clasificada sobre programas encubiertos. Según el exfuncionario, Estados Unidos estaría en posesión de naves recuperadas intactas y parcialmente intactas de origen no humano.
Asimismo, Grusch argumenta que en el pasado sufrió represalias ilegales por sus revelaciones confidenciales.
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