En 'The English' veremos la expansión de los Estados Unidos hacia el viejo Oeste usando como guía la historia de amor protagonizada por una aristócrata inglesa y un nativo americano que, por distintos motivos, están ávidos de venganza. Ella es Lady Cornelia Locke, el personaje interpretado por Emily Blunt, y él es Eli Whipp, el indio Pawnee al que da vida Chaske Spencer. Juntos formarán un equipo que lo va a tener realmente difícil en un contexto que parece haberlos sentenciado de antemano.

 

Un misterioso hombre ha asesinado al hijo de Lady Cornelia y ella acaba de llegar desde Inglaterra para encontrarlo y acabar con él. Por eso quiere llegar hasta Kansas, pero el reguero constante de sangre a su alrededor le hacen darse cuenta de que no llegará muy lejos si viaja sola.

Eli, por su lado, quiere ir hasta Nebraska para reivindicar el pedazo de tierra al que debería tener derecho por haber trabajado como soldado para el ejército estadounidense, pero no se lo van a poner fácil. Como le dijo un compañero de filas "Allí eras uno de los nuestros, pero aquí fuera, eres uno de ellos".

Eli Whipp en 'The English'

La expansión hacia el Oeste

Desde el propio arranque de 'The English' veremos la crónica de un exterminio despiadado. El momento histórico en el que sucede la trama es 1890. Los ingleses llevan colonizando América desde comienzos del siglo XVII y la constitución de los Estados Unidos se viene fraguando desde finales del XVIII. La serie cuenta el momento en el que toca expandir fronteras y lo hace dejando claro que acabar con la vida de los indios no supondrá ningún problema moral para los colonizadores.

Lady Cornelia en 'The English'

Por la estética y la actitud en el desarrollo de sus conflictos, 'The English' podría recordarpor momentos al estilo Tarantino. Para algunos, de hecho, las constantes descargas de violencia acabarían por soterrar la propia historia de amor entre sus protagonistas. En medios norteamericanos como Los Ángeles Times se pueden leer crónicas críticas con ese planteamiento, que encuentran excesivo incidir tanto en el lado violento y el hecho del exterminio. Lo que está claro es que la ambición de hacerse con un pedazo del mundo cegó a muchos migrantes europeos y, visualizada la promesa, llegó la ceguera ante la injusticia. La única ley realmente imperante era la ley del más fuerte, o matas o te matan, los personajes de 'The English' lo tienen claro y por eso son de gatillo fácil. El racismo será el siguiente ingrediente para aderezar la sinrazón y el individualismo la seña de identidad del nacimiento de un mundo nuevo.

Lady Cornelia en 'The English'

Reinventando el western

Los amantes del western no deben perderse esta serie porque estamos ante una revisión brillante del género. Su hechura visual trasciende a los clásicos sin dejar de recrear con acierto sus elementos básicos. Los diálogos, por ejemplo, son inteligentes, como de buen entendedor, de esos de camino corto, de no tener que extenderse, de intuir por experiencia y picardía las intenciones del otro a sabiendas de que no hacerlo puede costarte la vida.

Lady Cornelia en 'The English'

Los paisajes destacan, y lo hacen por su belleza, tan inquietante como estremecedora. El polvoriento suelo de los más recónditos senderos, la engañosa calma de los campos dorados, los lagos y los horizontes montañosos en los que una roca pronto tendrá su propio reguero rojo de sangre caliente son solo parte de esa estampa, de fotografía impecable, por la que nos resultará fácil sentir que estamos dentro de un spaghetti western en toda regla.

'The English' atardecer

Los protagonistas

Eli y Cornelia son esenciales para hacer caminar la historia. Aunque todavía lo desconocen, están unidos por un pasado compartido que poco a poco irá aflorando. Pero el camino futuro es el que les depara mayores retos que los pondrán a prueba y al límite de sus propias fuerzas tanto física como psicológicamente. Su destino común es la nueva ciudad de Hoxen, Wyoming, donde la investigación del sheriff local Robert Marshall para esclarecer una serie de misteriosos asesinatos les hará conectar, precisamente, con ese pasado que les une.

La química entre ellos puede no ser obvia en un primer momento. No parecen personas pertenecientes a una misma realidad aunque sus mundos se empeñen en entrelazarse. Habrá que dejar al extraño azar el hecho de que se encuentren y a la inestimable intuición que decidan permanecer juntos. Pero esta pareja, aunque solo sea por atípica, desprende un magnetismo innegable. De hecho, el momento en el que se conocen, que aparece en el propio tráiler, está cargado de una premonitoria intensidad.