Javier Calvo y Javier Ambrossi agradecieron la acogida que está teniendo su nuevo trabajo después del éxito de sus anteriores series 'Paquita Salas' y 'Veneno' durante la presentación en San Sebastián. Con 'La Mesías' dan un salto y después de una comedia y un biopic han creado una serie que va del thriller, al drama, o al terror, sin abandonar el humor. Toda una mezcla de géneros porque tal y como dijo Javier Calvo: "Eso es la vida".

"No me gusta que algo tenga que ser solo divertido, dramático o terrorífico. Creo que es la clave para todo y creo que hay hay que mezclar diferentes cosas", explicó Calvo. Además, Ambrossi reconoció el eclecticismo de ambos y ha apuntado que son una pareja creativa: "Somos dos y tenemos diferentes referencias y es una mezcla de todo, nuestras referencias juntas son una bomba", dijo provocando la carcajada de los periodistas presentes.

Efectivamente, la serie está cargada de referencias y tal y como contaron surgió del "interés por hacer una serie tipo 'Las jóvenes suicidas'", pero la idea inicial se les "quedaba corta" y siguieron investigando hasta dar con ese mundo de familias aisladas, hermanas y jóvenes que por creencias de sus padres acaban viviendo fuera de la sociedad. Encontraron muchos ejemplos, desde las hermanas Shaggs, a los hermanos Wolfpacks o la familia Turpin. "Nos interesaba mucho el aislamiento y en todos ellos había puntos en común como el fanatismo religioso que siempre venía de alguna creencia y su relación con el arte, ya sea haciendo música, películas o grabándose".

"Fuimos construyendo esto —sigue contando Calvo— y nos dimos cuenta de que estábamos haciendo una serie sobre irse de casa, sobre cómo tienes que irte. Yo me di cuenta con una película de Almodóvar que tenía que irme a descubrir el mundo". A esas premisas se fueron sumando capas, apuntó Ambrossi: "Mi propia relación con mi hermana y de las cosas que nos unen y separan y lo que supone ser hermanos". Así que también se habla de lo que supone ser hermano o hermana de alguien. Y así, una capa sobre otra se han ido sumando todas las referencias y experiencias personales que vuelcan en la ficción. Algo que han querido dejar muy claro es que "no se han basado en ningún hecho real y que es una serie totalmente original".

"Queríamos un proyecto que sobre las diferentes formas de creer desde todos los ámbitos porque hay muchos tipos de espiritualidad pero nos interesaba el de la manipulación desde la perspectiva fascista que tiene en su diana a una minoría frágil y le dice lo que puede o no puede hacer". Es algo que les preocupa también porque como afirmó Javier Ambrossi: "El colectivo LGTBI estamos muchas veces en esas". "La serie es una crítica contra el poder que oprime y reivindica también el poder de las minorías de escaparse".

Conexión con el público

Sobre la conexión con la generación milennial que consiguen en sus trabajos aseguraron que es algo que "sale, sin pretenderlo". Creen que quizá la clave es que no toman a los jóvenes por tontos: "Las generaciones que van después de nosotros saben muchísimo de lenguaje audiovisual y nos leen y saben cuando una serie es de plantilla". Frente a quienes aún hoy les dicen que "lo moderno es hablar de poliamor", Calvo asegura que "lo revolucionario es hacer cosas bien hechas, con calidad, cuidadas y con detalle. Eso es universal".

Para conseguir eso destacaron que ha sido clave el trabajo con la directora de fotografía Gris Jordana con la que ya trabajaron en 'Veneno'. Analizaron cada una de las escenas, para decidir los planos en relación con la psicología de cada personaje. "Ha sido muy bonito ese trabajo", recordaron.

Casting abrumador

Ambrossi tuvo a su lado a su hermana Macarena García, una de las protagonistas de la serie, y la emoción se hacía evidente al escucharle hablar sobre su relación. Además de la joven actriz, los creadores se han presentado acompañados de un apabullante elenco que cuenta con Lola Dueñas, Cecilia Roth, Carmen Machi, Ana Rujas, Amaia, Roger Casamajor o Albert Pla, toda una mezcla de veteranía e inexperiencia. Al intentar explicar cómo han llegado a reunir a ese casting, si entre las actrices están o no también muchas de sus referencias cinematográficas han terminado contando que se mueven mucho por sensaciones. "Hay pequeños gestos en un casting que te enamoran". Aún así, en algunos casos lo han tenido muy claro y han escrito los papeles "escuchando las voces de las actrices" como es el caso de Macarena García o Amaia, en otros no ha sido tan evidente pero también lo tuvieron claro nada más verles. En el caso de Cecilia Roth aseguraron que "fue ella la que les hizo el casting".

Amaia se estrena como actriz en la serie de sus amigos y aseguró que se ha sentido "en confianza y super cómoda y ellos han hecho lo posible porque nos sintamos así". "Ha sido un viaje increíble, hay muchas cosas que he aprendido de cómo se trabaja y también de mí misma, porque no sabía qué podría hacer. Me he sentido increíble y creo que se me ha dado bastante bien", ha asegurado con la naturalidad que la caracteriza.

Entre risas han explicado que "a Roger ni siquiera le escucharon hablar". "Ambrossi dijo que él era Eric y no sé si sabéis que esta persona es un poco bruja", ha aclarado Calvo. Eva Leira y Yolanda Serrano han sido las directoras de casting con las que han trabajado y ellas les animaban a buscar intérpretes más allá de su circulo habitual. Por eso, hicieron muchas pruebas para el personaje de Ana Rujas, que interpreta a Montse, la protagonista, en su juventud, pero siempre acababan volviendo a ella: "Quién es esa madre joven que no quieres tener, queríamos una mezcla entre Penélope Cruz en 'Jamón Jamón', pero pasada por Brittany Murphy que sabes que te va a traicionar porque es su naturaleza".

Albert Pla también es más conocido por su carrera en la música, pero ya ha hecho algunos pinitos como actor. "Está bien esto de creer en dios durante seis meses", dijo sobre el proyecto provocando la carcajada de los presentes. Sobre su casting, los creadores contaron que le hicieron hacer muchas pruebas porque al personaje de Pep lo habían imaginado físicamente diferente, más alto y casi como un extraterrestre, pero les terminó de convencer con un gesto que hacía con la mano. Los creadores recuerdan que ya hubo un momento que Pla les dijo "bueno ya está, ¿no? ¿Cuándo empezamos?".