Antonio Resines estuvo ingresado por COVID durante más de un mes. El actor sufrió la cara más dura de la enfermedad, e incluso pasó varios días ingresado en la UCI durante los que sufrió numerosas alucinaciones.

En laSexta Noche, ha confesado una de las más curiosas: "Se me ocurrió, en un delirio, que para una deuda que tenía contraída con la casa Windsor tenía que buscar un avalista porque no tenía dinero para pagarles. Se me ocurrió que el Ayuntamiento de Madrid era el avalista perfecto. La cantidad eran 12.000 millones de euros al mes y cuando le dije al Ayuntamiento de avalista, los que me querían matar me dijeron que era imbécil". Puedes escuchar su anécdota al completo en el vídeo principal de esta noticia.