Debido a los acuerdos con el Vaticano, España se había comprometido a finales de los 70 a incluir "la enseñanza de la religión católica en todos los Centros de educación", públicos incluidos. "Es una anomalía que tú puedas dar clases confesionales en una escuela en un país donde la Constitución dice que es aconfesional", apunta Jesús Bastante, redactor jefe de Religión Digital, que defiende que "tal vez su sitio no debería estar en una escuela, sino en las parroquias y la catequesis".
En el vídeo sobre estas líneas, laSexta Columna hace una prueba en la calle de conocimientos religiosos. Enseña a los entrevistados un cuadro de Murillo con una escena bíblica que está en el Museo de El Prado: 'La Anunciación'. Sobre todo los más jóvenes fallan en cultura religiosa, y esto tiene que ver con que hace dos décadas, casi un 80 por ciento de los alumnos de la escuela pública cursaba Religión y hoy ha bajado hasta el 45 por ciento.
Para estudiar historia de la religión en el colegio, o aprendes religión tal y como quiere la Iglesia, o nada. "No es un programa de enseñanza rigurosa, crítica y científica de la religión", apunta el doctor en Teología Juan José Tamayo. "Los profesores de religión los eligen los obispos y los paga el Estado" comenta por su parte Juanjo Picó, presidente de Europa Laica, que también señala que esto supone "más de 750 millones de euros al año. Un dislate".
De historia del catolicismo vamos justitos, y de otras religiones, como el islam, no sabemos: ¿Por qué no una asignatura de Religión en la que se estudie su historia y no su dogma? "Sería algo fundamental, también para entender nuestro país, que no siempre ha sido exclusivamente católico con ocho siglos de presencia islámica y muchísimos siglos de presencia judía", señala Bastante.
Lo desvela Juan Fernández Miranda
Así fue la conversación del rey Juan Carlos con el jefe del CESID sobre Bárbara Rey: "Tuve un gesto con ella, le toqué un pecho"
Los periodistas Juan Fernández Miranda y Miguel González explican en este vídeo de laSexta Columna cómo se fraguó el chantaje de Bárbara Rey al rey Juan Carlos y el papel que tuvo el CESID para frenar el escándalo.